Tus páginas tristes dicta el hastío...*

Disculpen mis ausencias. He experimentado una abstracción total que no me es desagradable.

Sí, es cierto, CAMBIE, y aunque de cierta manera ha sido un cambio poco positivo, creo que me encuentro mejor que nunca.

Fue extremo, es verdad, pero así soy, jaja, en el fondo, mis bases, mis principios siguen inquebrantables.

Escucho como le hablan a mi abuelo. Mi abuelo con un tumor cerebral. Mi abuelo cuyo habla siempre fue reconfortante para mi, que me producía temor y respeto. Le hablan como si fuera un bebé o un retrasado y eso me enfurece. Me dan ganas de gritar. Mi madre se martiriza viniendo cada fin de semana. Yo contengo un vomito agrio cada vez que veo como lo hostigan. Lo extraño y aún está aquí. Lo quiero y temo echarme a llorar si se lo digo.

Soy cobarde, lo sé y lo asumo.

Temporada de muertos. Los difuntos vuelven.
Mi México, mi amado país... Aquí ahora es siempre día de muertos, pero ya no tenemos la certeza de que nuestros familiares asesinados vengan a disfrutar de lo que preparamos para ellos.

Estoy tan triste... Y me siento tan sola.

No estamos bien.



*La canción del hastío

Yo sé que soy mejor que todos ellos...

Hoy tengo ganas de escribir, y ciertos factores hacen como que dude si el destino trata de animarme o de disuadirme.
Está entrada por ejemplo escrita por el jenial Andrés Borbón (que se merece el adjetivo jenial con j) me dice que lo haga... pero Napoleón desconfiguró mi teclado, de manera que no agarraban los acentos ni las comas (gracias a Dios pude arreglarlo picando muchos botones a la vez), y ayer, Ale también me alentó a escribir, lo cual también es jenial.

La verdad, nunca he querido ser leída demasiado. Este blog inicio porque quería escribir para mí, y creo que lo he logrado con mediano éxito. Lo que no significa que odie a todas las personas que se toman el trabajo de leerme.

De ninguna manera quise volver esto algo tipo autoayuda, pero creo que si alguna vez, alguien, quien sea, se ha sentido mejor al leerme, o ha olvidado por un momento sus problemas, he hecho lo que todos los escritores intentamos hacer.

Últimamente he estado intentado evadirme de algo muy cañón por lo que estoy atravesando, si pero la verdad sé que nomás lo estoy postergando, aunque también sé que es algo más bien natural... Pero bueno.

Ammm... puedo contarles cosas más o menos interesantes, por ejemplo;
Leí un libro que se llama "Fantasmas y aparecidos en la Edad Media" de Claude Lecouteux y no sé, uno pensaría que se trata de relatos o así, pero es más bien sobre "testimonios" y así sobre los usos y costumbres de países sobre todo nórdicos en cuanto a ritos funerarios.

Vi una película llamada El Infierno, y me reí demasiado hasta que caí en la cuenta de que eso tal vez realmente está pasando en mi México. Y entonces me dolió.

Aprendí a dejar de odiar y empecé a arder. Un cambio que hasta ahora, me ha beneficiado mucho.

Mi anterior entrada comentaba un cambio. Algo tipo kármico, sabes cómo?
Si tengo que mostrarme como una perra superficial para poder afrontar al mundo sin huir, lo haré, de verdad.

Me he contenido durante demasiado tiempo, ansiando que mis arranques conmoviesen al mundo. No funciono. Hora de intentar algo más, jajaja.

Siento que pierdo el tiempo. Se acerca noviembre... Mi crisis anual más día de muertos, cool. Jajaja.

Espero una llamada extraña. La tendré?