domingo, 25 de agosto de 2013

Ya no me soporto en las grietas de la espera ni en el sopor del silencio.*

El lunes entro a la universidad y estoy muy nerviosa.
Espero ser capaz de tener éxito en está nueva etapa, quiero ser más perseverante que nunca.

Estoy viendo The Devil's Advocate, me encanta como sale Al Pacino, no sé porque me agrada ver películas en las que las personas se ven arrogantes pero no me gusta tratar con arrogantes en la vida real.

Ah, sí, la universidad... Espero hacer nuevos amigos, no es que los viejos me aburran o quieran deshacerme de ellos, pero es agradable conocer a más personas.

El miércoles fue la bienvenida, estuvo muy larga pero dieron información interesante. Al parecer, casi todos los profesores tienen doctorado y es muy padre que ellos mismos den las clases en vez de enviar a sustitutos.

Además, todos mis compañeros de carrera se ven simpáticos. Tienen ese frenesí de vivir que es encantador.
Como propósito, espero hablarles a todos.
Pero también se supone que voy a estudiar, no a hacer desmanes... Entonces espero lograr un equilibrio. Eso es.

Debo conocerme y debo aprender a administrar mis tiempos. No debe ser muy difícil, muchas personas lo consiguen.

Escuche por casualidad al ensamble de voces de la UAMI y me pareció fenomenal. Quiero aprender de ellos, es realmente increíble.

Otro día importante para mi es el 27. Estoy muy ilusionada. Quiero que todo sea perfecto. Tendré demasiadas expectativas para todo?

Estoy en la sala con Parsi y Napo y es gracioso porque Parsi ronca muy fuerte, pero es de esos ronquidos raros que sólo salen cuando duermes muy plácidamente.

Me gustan las historias de ángeles. Hasta las más violentas son bonitas.

Estoy bien simple, pero quiero escribir. Escribir mucho. Escribirlo todo.

Intentaré escribir algo por lo menos una vez a la semana, como para formarme un hábito.
Es cierto que a veces no pasan cosas insólitas, pero la "normalidad" también puede ser escrita, no? Es decir, puedo escribir lo que se me pase por la cabeza sin tener que preocuparme por si es algo interesante o digno de ser leído.
Por eso esto es un blog personal. Escribo lo que puedo y lo que se me da la gana.

Estaría padre que me sugiriesen pelis o libros sobre ángeles. Si pueden, por fa, háganlo.

Me voy a dormir.

*Las vírgenes terrestres de Enriqueta Ochoa.

domingo, 11 de agosto de 2013

Cargaba a cuestas mi alma, rota y sangrante, que no soportaba ser tocada por mi y no hallaba yo donde posarla...*

No estoy triste en estos momentos, pero el título me pareció muy ad hoc para lo que voy a escribir.

Verán, el sábado después de la reunión del Patria fuimos a comer a casa de mi padrino A., su esposa se llama R. y es muy mona y linda y la admiro y quiero mucho.

Comimos sopa de verduras, salmón y ensalada riquísimos, luego tomamos café y comieron un pan que ellos prepararon que se veía wooow. Se me caía la baba, pero pues estoy intentando disciplinarme, así que nomás los veía.
La sobremesa fue muy extensa, nos marchamos como a las 9 y se hablo de todo, pero lo que quiero contar aquí fue una pregunta que me hicieron porque tienen un familiar que no se quedo en ninguna buena prepa y al chavo parece valerle un cacahuate lo que sea de su vida, y eso los tiene muy preocupados.
Bueno, me preguntaron: "¿Por qué es así? ¿Cómo podemos ayudarlo?"
Les dije que yo no lo conocía, pero por lo que decían me parecía que estaba deprimido. Me preguntaron de que podría deprimirse un chavo de 15 años que no tiene ninguna preocupación o Dolor real... Me saco mucho de onda esa pregunta.

Su perspectiva es muy comprensible, aunque a la vez adultista. Es verdad, la mayoría de la gente que está deprimida no tiene motivos "reales" para estarlo. Es decir, está sana, su familia está bien, no tiene que tomar decisiones que afecten la vida de otros. Pero es que la depresión no es un "Ah, que aburrido es esto, voy a deprimirme para ver que se siente".
Porque uno sea joven y no deba preocuparse por cosas materiales importantes, no significa que el mundo es perfecto y que todo será ideal todo el tiempo. NO. Es decir, además de las hormonas y la búsqueda de identidad en un mundo donde casi todo es falso, es cuando abres los ojos. Y bueno, si decides volver a cerrarlos y ser feliz sin ver, qué chido! Pero si quieres mantenerlos abiertos a pesar de ver que todo lo que creías que era hermoso y colorido es más gris y feo que una rata muerta.

¿Por qué me deprimí yo? Porque nunca había fallado, y cuando fallé no supe como lidiar con la culpabilidad que sentía. Como ya había fallado, me consideraba una perdedora y ¿Para qué volver a intentarlo si una perdedora siempre falla? Luego me di cuenta de que probablemente falle a propósito.

Creo que todos en algún momento nos sentimos más solos e incomprendidos y eso nos hace estar tristes y para esconder que estamos tristes muchos caemos en ataques de ira o de mutismo, o en alguna adicción o algo por el estilo.
Yo además de sentirme sola e incomprendida por todo el mundo, no me sentía ni respetada ni valorada por mis padres y eso fue lo que más dolió. Entonces reaccione agresivamente: Si tú me haces daño porque no me valoras ni me respetas, yo te voy a hacer daño dañándome a mi.

Me costo años entender que hacía eso y que era muy pendejo, porque la verdad aunque sí me chingué a mis papás y de paso a mi hermano, me chingué más yo, pero era un círculo horrible. Me haces daño- Me hago daño para hacerte daño - Me haces sentir culpable - Te odio por hacerme sentir culpable - Ves que me siento culpable y me haces más daño - Me hago daño para hacerte daño a ti.
Y es que siendo sinceros, ¿qué le duele más a un padre que un hijo que no cumpla sus expectativas? Pues uno que ni siquiera lo intente porque no tiene pasión por la vida.
Aún me cuesta escribir de esto porque realmente es muy reciente que me cayó el 20 y me dije a mi misma: "Pamela, no mames, ¿Qué pedo contigo? A este paso no vas a lograr nada" Y el nada era literal, ni conseguía dañarlos tanto como para que dejaran de chingar, ni dejaban de chingar solitos ni me sentía cómoda con ese juego.

Entonces pensé en qué debía hacer para que dejaran de chingar (y digo chingar no como ser insistentes, sino como decir cosas que duelen y que ni siquiera parpadeen cuando lo hagan). Creí que el primer paso era terminar la prepa, entonces voy sola, busco una escuela, hago los trámites y toda la onda y PAPALOTE!
En la escuela esa me gritaban y pues si ya me estaban chingando en mi casa era el colmo que me gritaran en esa escuelucha por cosas bien estúpidas. Les dije a mis papás que me quería salir y me dijeron "Aguántate, te lo buscaste" y yo entendí "TE LO MERECES" así que mi orgullo me pico y pase unos meses más hasta que solita dije NO, NI MADRES, YO NO MEREZCO QUE NADIE ME MALTRATE. Y mande a la chingada aquella escuela y a la vieja fea que me gritaba.
Luego me las vi negras porque ya me faltaban 3 materias... Las matemáticas... Pero ahí si hable con mis papás y les dije que necesitaba ayuda con eso y fueron buena onda y me consiguieron un tutor que me hizo dejar de odiar la Matemática y ya termine la prepa.
Cuando tuve el certificado en mis manos, pensé que por fin iban a dejarme en paz, pero no fue así y no creo que se den cuenta de como siguen chingando.

Pero... yo cambié mi actitud. No creo ser más madura ni más lista, y después de la sensación inicial de triunfo que me dio cuando tuve el certificado en mis manos que me hizo desear gritarle a medio mundo "CHÚPENSE ESA! ¿No que no iba a poder?" y llevarme el chasco que ni así me dejaban en paz, pues decidí no permitir que eso me molestara.

Ah, también entendí que mis papás me aman, pero son mis papás y no mis amigos, que sólo quieren lo mejor para mi y que aunque no me entiendan, no les queda de otra que aceptarme. Y al final, cuando me muera, sabré que hice lo que pude para salvarme.

¿Qué puedes hacer para ayudar a alguien que la está pasando mal?
Yo creo que aunque seas un entrenador de vida y esas cosas, no debes sermonearlo ni darle lecciones. Respeta su Dolor (ningún Dolor es despreciable).

Puede que veas las cosas más claras que esa persona, eso puede hacer que te den ganas de asfixiarlo por ser tan zoquete como para deprimirse por algo que tiene salida. Pues ese o esa zoquete no ve la salida porque está en una lucha constante por encontrar algo a lo que aferrarse, por seguir vivo. No le digas que tiene la solución frente a su nariz porque aunque así sea de la nariz al cerebro hay espacio suficiente para poner miles de cosas que no te dejan ver la solución.
No le ordenes, no le grites, no lo sacudas. Sugiere el mejor camino para que esa persona se de cuenta sola de la solución a su problema.

No te hagas la víctima. Aunque te duela ver depre a alguien a quien quieres mucho, no le añadas carga, la está pasando fatal como para tener que preocuparse por tu comodidad.
Acepta que está depre, que no se le va a pasar en 3 días, que va a requerir constancia por parte de todos pero que la decisión final es de quien está depre.
Por más que tu quieras llevarlo al otro lado del río, si una persona quiere ahogarse va a hacerlo. Y cuidado, porque a lo mejor si te interpones mucho, primero te ahoga a ti para que dejes de impedirlo.

Creo que lo mejor que puedes hacer es eso. Respetarlo, amarlo, creer en él, hacerle saber que si lo necesita la mano que le tiendes va a estar allí.

Espero que esto le sirva a alguien.


Y si nada de lo anterior funciona, siempre puedes regalarle un gatito simpático.





*Estoy bastante convencida de que es un fragmento de las Confesiones de San Agustín, pero no recuerdo que libro exacto es. Aquí el link en PDF de las Confesiones enteras, si alguien desea leerlas.

viernes, 9 de agosto de 2013

El ímpetu primitivo baila con el ímpetu mecánico, ignorantes en su frenesí de la luz natural.*

En serio he intentado escribir, tengo guardados unos 4 o 5 borradores que no publique porque no complete nada.
Ni siquiera mi parloteo deshilado esta presente en esos post.

No sé porque las palabras se negaban a salir de mi, como si pensarán que afuera hay peligro o algo por el estilo... Bah.

Mi mamá escucha música mexicana, pero de la melancólica... Creo que está un poco borracha.
El miércoles se emborrachó mucho. Es raro verla así. Supongo que la visita de uno de sus amigos de la universidad tuvo mucho que ver.
Es curioso como olvido a veces que mi mamá tuvo mi edad. Es triste olvidarlo.

- Hace tiempo que no las oía de esa manera... ¿Qué haces tesoro?
- Escribo.

Y se corta el diálogo cuando ella sigue bailando, copa de vino en mano y yo sigo tecleando.

Hoy el día estuvo muy ajetreado.
Nos paramos muy temprano porque mi mamá está arreglando los papeles de un seguro que se supone que debió pagarle cuando lo de Estrella Roja (Aquí el post) Y estuvimos muchas horas en Chalco intentando que nos dieran acceso a los reportes del accidente. La Policía Federal estuvo muy muy amable, más que esos nefastos del Hospital Polanco que no tienen educación ni atención con los pacientes.
Bueno, no me gusta escribir para quejarme de lo mierda que van las cosas, pero arrgh, me da mucha rabia, mi mamá no ha parado de hacer trámites desde el 2011 y esos idiotas de Ace Seguros se hacen tontos.

Terminamos a las 4 de la tarde (Dijeron que ellos no tenían los reportes y que era necesario que fuéramos a Puebla para ver si por si acaso los tenían allá) y después fuimos a recoger a mi hermano.
Paramos un poco en una tienda departamental, después comimos y después regresamos. Otras 2 o 3 horas de recorrido.
Es horrible que mi mamá deba hacer ese trayecto (o gran parte de) todos los días que va a trabajar.

He notado que no soy muy inventiva, por ejemplo, para los títulos de este blog siempre utilizo fragmentos de poemas o canciones, supongo que porque la poesía es subjetiva y estas letras también lo son.
Es mi pequeño Ningún Lugar.
A veces, cuando me entran ganas de recordar, leo lo que he escrito y no sé, para mi las letras son lo que la música para mi papá.
Mi papá siempre dice que la música tiene ese don de transportarte a través del tiempo, te hace recordar cosas que olvidabas que existían y sentir lo que sentías en ese momento. Me pasa lo mismo cuando leo un libro que leí hace mucho tiempo o cuando leo algo de lo que he escrito.
No creo que mis post's tengan algo especial, creo que es porque aunque tengo memoria de teflón, sé como  me sentía cuando lo escribí y eso trae todo de vuelta.... BUM!!
Por eso he de andarme con cuidado cuando leo y releo.

Me paso algo gracioso hace algunos días, iba a ver a José (fue quien me invitó muy amablemente a participar en Detournement) y me quedé leyendo en el metro "Lejos del polvo" durante algunos minutos, lloré un poquito y cuando alcé la vista un señor me veía con cara de sacado de onda, entonces medio deje de moquear y guardé mi libro

Se me está olvidando algo muy importante, una de mis tías favoritas ya tuvo a su bebé, se llama Íker Santiago y se ve muy arrugadito en las fotos, pero mi mamá dice que así se ven todos cuando acaban de nacer.
Mi papá dice que yo parecía un mono porque estaba medio azul y peluda /: Eso es amor paternal y no chingaderas.

Hablando de azul, hoy fui extravagante y me pinte las uñas de azul real. Jamás creí hacer algo así, jajaja, pero según yo se ven padres.
Eso me recuerda que el lunes conocí a una surcoreana muy muy simpática que dice que le encanta México y las expresiones que sólo son de aquí, como "Ándale" y "Qué padre!!" y yo creo que está chido que hablemos mexicano, jajaja.

Escuchando Reactor oí que había bandas en el extranjero siendo dirigidas por mexicanos, como Napoleón Solo y pusieron "Ramira", creo que se llamaba la rola, pero antes tocaron una que me gusto mucho de Telepedro, se llama "Piña colada" y pueden escucharla y bajarla gratis aquí. Está bien padre, jajaja.

Ahora mi mamá escucha "Naila" y las dos lloramos a mares... Esa canción le encantaba a mi abuelo. Ay, abuelito, ya ni la chingas... Dejaste aquí atrás hartos corazones rotos... "Jijodela" dirías con tu sonrisa maliciosa y tus ojos bondadosos. Debes reírte mucho de nosotros allá dónde estás ahora. Y nunca te dije que te amaba, pero lo sabías, verdad?

De esos nudos en la garganta que duelen más que una infección en las anginas. 

*Danza de la muerte, Federico García Lorca.