Me sobran alas cuando caigo...

Cerca del río, río, simpre me rió de tu risa y sé que no me necesitas más, suenas como si no me conocieras, como si ya no te acordaras que estoy tranquilo como siempre y sé que no te necesito más (8)

Cielos, me estaba ahogando con el jugo de una mandarina y entonces tuve una revelación y aprendí a apreciar la vida.
Ok, no.

Han sido días difíciles.
Y aunque comparado con la miseria y carencias del mundo mi corazón congelado no es algo importante, es importante a pequeña escala, como los hombres en el Universo.

Pasado mañana es mi cumple.
Una bofetada y un escupitajo de la vida en la misma semana, jajaja.
Saben? Llegué a pensar que todos los humanos odiamos la vida y por eso nos empeñamos en vivir, para desafiarla, demostrarle que podemos reírnos de ella y morirnos en su cara.

Huy, encontre en Tecnoculto la cita ideal para esta pesimista entrada:

La razón por la que ellos quieren que encajes… es porque cuando lo hagas, entonces podrán ignorarte.

Seth Godin, escritor y blogger.

Es como curioso, porque encaja en todos los ámbitos, familiar, social, en el trabajo, en el amor, y así, una lista larga larga.

No mamar, Noémo me paso la nueva canción de Eniel y se me hace que lo hizo para que me echara a llorar...
Todo es real cuando sientes la amarga soledad, por favor ayudáme, hazme olvidar (8)



He estado releyendo un libro que se llama "Noches Púrpuras, Vino Agrio" cuyo autor es Francisco Jaymes y adquirí en la pasada feria del libro.

Además de lo doloroso que me resultaba por la desesperación que plasma, ahora le encontre el Dolor.

Les pondré un poema títulado "Fábula" y lo copió tal cual esta en el libro.

FÁBULA

Porque el sol derrama sombras...
después de todo.
Karl Marx

Murió su imaginación y su deseo
su sonrisa y sus sueños
y aguardo bajo la tormenta
hasta que cayó del árbol dónde vivía

y fue su tristeza
el llanto congelado en el vientre,
y fueron sus palabras
rajado aullido de desesperanza,

y fueron sus ojos
el abismo de su miedo,
y cuando lloró
fue cielo gris de otoño,

y gritó su ira
pero ya era muy tarde.